-¿Jugamos a olvidarnos?
-Venga, pero empiezas tú.
-No, no quiero tener ventaja.
-No la tienes; recuerda que tú empezaste a querer primero.
-Empieza por mis pies, para que no pueda aferrarme al suelo. Así será más fácil.
-Está bien, pero antes debes descalzarte. No podré olvidar jamás el precio de esos 'manolos' que te regalé por nuestro aniversario.
Buenísimo.
ResponderEliminarMe encantan tus entradas... originales y atrevidas.
ResponderEliminarSaludos ;)
mancantao
ResponderEliminarCuanto más lo leo, más bueno me parece.
ResponderEliminarCuanto más miro mis zapatos, más me gustan ;)
ResponderEliminarGracias por venir, a todos.