viernes, 27 de mayo de 2011

Placeres (in)confesables


Me encanta hacerlo; de hecho, pienso que no hay nada que me produzca más placer. Cuando era pequeña me parecía extraño, hasta molesto. Mi madre decía que me acabaría acostumbrando, que es algo que nos sucede a todas al principio. ¡Qué razón tenía!

Antes me daba vergüenza reconocerlo, pero ahora que he perdido prejuicios, confieso que para mí, aparte de una necesidad fisiológica característica de nuestra especie, se ha convertido en un juego divertido. No se trata sólo de sanearme; mudar de piel me permite renacer y convertirme en quien yo elija durante largas temporadas.

8 comentarios:

  1. Hermoso cuento, pardiez.

    Pero revise la errata en 'prejuicios' y un punto bailón en el primer párrafos.

    Mis saludos,
    Mario

    ResponderEliminar
  2. Gracias, don Mario, por su visita y correcciones. Una, que está alterada con la muda ;)
    Un saludo.

    ResponderEliminar
  3. Leerte si que es un places (in)confesable... como mudar la piel para convertirse en quien tu quieras...
    Un saludo muuu grandote ;)

    ResponderEliminar
  4. D. Mario Moliner, un breve apunte a su corrección:

    prejuicio.
    1. m. Acción y efecto de prejuzgar.
    2. m. Opinión previa y tenaz, por lo general desfavorable, acerca de algo que se conoce mal.

    perjuicio.
    (Del lat. praeiudicĭum).
    1. m. Efecto de perjudicar.
    2. m. Der. Detrimento patrimonial que debe ser indemnizado por quien lo causa.
    3. m. Der. Indemnización que se ha de pagar por este detrimento.

    ...quizás, antes de corregir erratas, debería de preguntar al autor que quiso decir. O mejor, preguntarse a usted, que ha entendido, porque una cosa es lo que usted entiende y otra muy distinta lo que los demás entendemos.

    Un saludo, Par dios.

    P.D.- imprecar. Proferir palabras con que se expresa el vivo deseo de que alguien sufra mal o daño.

    ResponderEliminar
  5. Qué bella serpiente.

    A mí no me parece un cuento, me parece un microrrelato...ya sabes Cris, de esos que al final y entre líneas, te hacen pensar.

    Un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
  6. Señor Guillermo,

    Usted no se entera de nada. Le señalé a la dueña de este blog la errata, porque acentuó la palabra 'prejuicio' que, por ser diptongo, no precisa la tilde que en un principio se puso.

    Buenos días,
    Mario

    ResponderEliminar
  7. Y yo que estaba pensando en otra cosa... Muy bueno el micro!

    ResponderEliminar
  8. Gracias, Pablo; un placer confesable verte por aquí.

    ResponderEliminar