domingo, 26 de mayo de 2013

Tener y no tener

No sé por qué me quejo, en esencia tengo todo lo que necesito, lo importante. Casa, comida, amigos, familia, abrigo, calor, espacio, hilo y aguja, un manual de supervivencia por el que algunos mataríais, guerra para transformarla en paz y poder dormir a gusto, botellas de agua medio llenas y otras medio vacías, helado, caramelos, paraguas, una colección de camisetas, mensajes que me animan, la tapa de un Bic mordisqueada, las uñas cortas, los zapatos limpios y los pies descalzos, el barro, el queso que tanto me gusta, agendas sin prisas, calendarios descuidados e ideas engarzadas sin ton ni son. Están también los planes, los que se precipitan y los que se retrasan una semana más, la música, el silencio. A pesar de todo, a veces añoro lo perdido, aquello que nunca tuve o que se me escabulló de entre las manos, el libro que olvidé en un parque, las conversaciones evaporadas, las fotografías veladas, los besos lanzados al aire y algunas cosas que nunca conseguí atrapar por falta de habilidad. Ambiciono lo subastado hace tiempo, aquello que ya tiene dueño, los vaqueros que regalé a una amiga y las gafas que alguien me birló de un probador. Deseo todas las manos, todas las bocas, los gestos y cada estúpido momento. Tejo historias, a veces tiendo puentes colgantes, improviso lianas por las que avanzar entre la jungla. Quiero ser yo y también ser otros, ser todos, desdoblarme. Ser funambulista o bailarina de claqué, un perezoso o un koala, aprender a nadar como lo hacen las medusas, volar como un albatros y saltar como saltan las pulgas. Si pudiera, elegiría todos los artículos del catálogo, en todos los colores y formas disponibles. 
Ya, ya lo sé. Tengo todo lo que necesito, pero no es suficiente. Tal vez nada lo sea, quizá nunca me quede satisfecha.

13 comentarios:

  1. Gran retrato de la mentalidad consumista y acumuladora en su esfuerzo insaciable por llenar un vacío con posesiones.
    Curiosamente la plenitud se adquiere al revés.
    Entre más te acomodas al vacío, se te va dando todo.
    Un principio Taoísta.

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  2. Se me olvida lo más importante, Carlos: ¡Me tengo a mí! (casi ná;)).
    Y sí, la plenitud consiste más en vaciarse y dejar espacios para llenar con cosas mucho más importantes. Mi mochila de insatisfacciones pesa poco, afortunadamente.

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  3. No tienes por ejemplo pasear conmigo de la mano por la playa un atardecer de primavera.

    :P

    Besos.

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  4. Leches, Toro, ahora sí que me pesa la mochila ;)
    Besos.

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  5. ¿Ser un perezoso o un koala? Mira que yo te veo más siendo un delfín, o una sirena...
    Aléxis.

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  6. No te preocupes, Cristina, en exceso. Si tienes todo eso que dices, ya casi no te falta nada:Quizá ahora sería conveniente que empezaras a pensar que te tienes a ti misma también. Es lo más importante.

    Un afectuoso saludo,

    Antonio

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  7. Ambición, de quien sabe apreciar y quiere abarcar con entusiasmo y valor cada pequeño y grande gesto y las sensaciones de las que la vida y nosotros mismos al abrirnos a ellas vemos, somos, queremos. Sí, un síntoma claro de alguien feliz, o con el propósito de ser feliz, que sabe compartir lo que celebra a cada momento. Buena señal, de quien quiere vivir pletórico y radiante a cada momento. ¿Y por qué no morir en el intento? Tiempo habrá -y sobre todo, ya lo hemos conocido- para las sombras y los días subterráneos. Felicidades, un beso. A ti, a los tuyos, de los que siempre me acuerdo.

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  8. Aléxis, también quiero ser un delfín, claro. Una sirena no, me gustan mis piernas ;)
    Antonio Martín Ortiz, a mí misma me tengo y me sostengo. Por cierto, bienvenido. abrazo de vuelta.
    Carlos Medrano, amigo querido, el propósito de ser feliz supone casi un 80% de posibilidades para llegar a serlo, ¿verdad?. Las sombras y el subsuelo para los hombres grises, nosotros amamos la luz... Un beso fuerte y gracias por pasarte.
    Álvaro, Alvarete, besos y gratitud. Y bueno, lo de doloroso no sé si lo comparto, pero como eres tú quien lo dice, bien dicho está ;)

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  9. No sé si hablas de ti o tu texto se refiere a la insatisfacción general del ser humano. En cualquier caso, unos cuantos podemos aplicarnos el cuento, Cristina, por no decir todos.
    Me gustan tus textos, me hacen pensar, reflexionas acerca de temas tan cotidianos de una forma magistral. Te felicito.
    Maca.

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  10. Tener o no tener ... gran dilema, mayor que el ser o no ser
    La insatisfacción del ser humano, tener lo que no tienes .. siempre falta algo.
    A ti por ejemplo, te falta el paseo por la playa cogida de Torito jejeje
    Porque el resto lo tienes todo y lo que te sobraba lo las tirado (ya no tienes dolores ;) )
    Estoy cayendoooo que a mi solo me falta lo mismo ... me están entrando celos joooooo ... Toritooo yo también quierooo!!!!
    ¿ves siempre hay algo? me faltaba algo y lo conseguí en mi visita a Madrid jejeje
    Un fuerte abrazo mi querida amiga

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    Respuestas
    1. Maca, hablo en general, no me refiero a mí, aunque utilice la primera persona para expresarme. Hay una oleada de insatisfacción general en el ser humano, y en estos tiempos, tal vez más. Yo me lleno de otras cosas que me ayudan a crecer, y ninguna es material, por suerte. De lo contrario, estaría en una situación de riesgo importante, jaja.
      África, ese paseo con Toro es nuestra asignatura pendiente; tendremos que conocerlo ya.
      Besos y gracias por pasaros :)

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    2. Y tanto ... una ilusión que bien merece la pena

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